Donde la historia se encuentra con la grandeza perdurable
Hacienda San Antonio Millet Fundada en el Siglo XVI
‘Mul Chac’ (Cerro Rojo) fue el nombre con el que los mayas bautizaron este sitio de cría de ganado desde 1667, que más tarde comenzó a dedicarse al cultivo del henequén como buena parte de esta zona del estado de Yucatán.
A finales del siglo XIX, esta hacienda pasó a manos de los Condes de Miraflores, quienes la rebautizaron como San Antonio Peón. En aquella época, los dos edificios principales fueron objeto de una espléndida renovación y se construyó la capilla. Con materiales de origen francés y reminiscencias medievales y renacentistas, la hacienda adquirió un estilo propio.
Al alba del nuevo milenio, dos parejas se dieron a la tarea de salvaguardar el tiempo sellado en los muros de la hacienda. Esta aventura, cuidadosamente planeada, dio como resultado el esplendoroso lugar que hoy conocemos como Hacienda San Antonio Millet, cuyas puertas se encuentran abiertas a visitantes de todo el mundo.